NACIMIENTO DE MOON OF GAIA
- TIERRA ANCESTRAL
- 15 may 2018
- 3 Min. de lectura

Sentía ya las contracciones en mi útero,
sentía mi canal con ganas de abrirse cual caudal y traer a mi hija creativa a éste mundo, a éste plano, a éste mi nuevo tejido,
a mi nuevo camino.
Voy a ser mamá- pensé
Ufff MADRE, cuánta responsabilidad-
Cinco meses de gestación intensa y unos cuatro más desde que ésta semilla comenzaba a cobrar vida, a botar y a enviarme señales y magia desde el corazón.
Cinco meses de introspección, cinco meses de arduo trabajo conmigo,con mi amor, con mis heridas, con mi ser más profundo y mi ser superior, cinco meses donde mis cuerdas viejas se tensaron tanto que tuve ganas de romperlas, ganas de decir basta y hasta de tirar la toalla.
Pero no había caminado tanto para dejarme caer así,
no había escarbado tanto mi alma como para permitir que el miedo una vez más me hiciera volver atrás.
Esta vez no,
ésta vez mi corazón de loba y mi mujer salvaje me impulsaban a levantarme,
a sacudir mis huesos,
a mantener fijo mi centro,
a sacarme las telas viejas,
a confiar en lo que vendría,
a romper en pedazos los miedos,
y a creer que como cualquier otro,
soy merecedora de TODO ESTO.
Esa mujer salvaje me impulsó a todo,
menos a tirar la toalla,
todo,
menos rendirme por miedo a sentirme nadie,
a sentirme fuera de la manada.
Pero ,
¿ Y quién es nadie?
¿ Y quién soy yo, Moon of Gaia?
Salvo un alma más en esta galaxia,
que desea sanar el mundo desde su corazón más puro,
sanar el sagrado masculino y femenino en cada interior,
sanar cada herida y brecha que aún quedó abierta en la tierra,
y lograr bajar la armonía divina a éste planeta.
Quien soy yo ,
salvo una humana cubierta de piel y huesos,
cubierta de cicatrices ,
cicatrices que una vez sanadas,
se convirtieron en la mejor medicina para mi alma,
cubierta de amor por Gaia.
Una humana con miedos que le fueron impuestos ,
una humana que tuvo que soportar mucho desgarro y dolor para poder despertar,
pero un alma llena de tanta fuerza, de brillo, de luz, de ganas y de esperanza.
Una hija del universo,
llena de sol y de luna,
de fuego, de aire , de agua y de tierra.
Un alma que hoy se siente querida y honrada por todo su linaje,
por todas sus hermanas.
Un alma que a cada paso que la humana avanzaba,
brotaba su universo interior en miles de estrellas y galaxias.
Una humana que se fusionó en uno con el auténtico anhelo de la esencia de su alma,
una humana que decidió hacer las paces con aquello que la atormentaba,
y un alma que se aseguró de que la humana después de tanto camino recorrido diera por fin el paso hacia su misión de vida, hacia aquello que para ella quedó escrito en su día.
Un alma y una humana cogidas de la mano y dispuestas a cabalgar hacia donde otras mujeres no pudieron llegar.
Y hoy por fin miro hacia atrás y veo todo lo que se ha gestado con Moon of Gaia, honro cada día de trabajo en darle vida, honro cada danza con su energía, honro cada herida que me dejó que viera sin vendas para confiar en mí y en mi propia medicina.
Hoy,
junto a ti,
que has decidido venir hasta aquí,
nada me hace más feliz que presentarte a mi hija creativa.
Moon of Gaia,
hija mía,
BIENVENIDA A LA VIDA
GRACIAS. GRACIAS. GRACIAS
y AHÓ con el corazón.
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